El 9 de marzo conmemoramos un año más de la matanza de Pampa Irigoin en Puerto Montt. No derramamos lágrimas de pesimismo por este hecho, ni lo conmemoramos como una tragedia. Los pobladores recordamos esta lucha como una batalla heroica de los sin casa, que se enfrentaron a la policía y al estado para conquistar su derecho a la vivienda. Además, Pampa Irigoin nos recuerda el carácter del viejo Estado, sin importar el gobierno que esté de turno: un Estado a la medida de Latifundistas (como los dueños de los terrenos de Pampa Irigoin) y Grandes Burgueses.
Pampa Irigoin era un terreno de la familia Irigoin, latifundistas que allá en los años 60 acumulaban riqueza y tierra en una sociedad de privilegios para su clase, ubicado en la ciudad de Puerto Montt. Era el año 1969 y Chile estaba bajo el gobierno de Eduardo Frei Montalva, presidente demócrata cristiano que con leyes conocidas como de “Reforma Agraria”, buscó contener la lucha de los campesinos pobres que se alzaban en levantamientos por la conquista de la tierra para quien la trabaja. Pero ni con todas sus leyes, ni su apariencia “democrática”, pudo ocultar su verdadero carácter a la hora de reprimir y masacrar al pueblo.
La toma de Pampa Irigoin comenzó en el año 1968 con un grupo de 70 pobladores que ocuparon este terreno, levantando sus techos en medio del barro. Campesinos despojados por la concentración de la tierra, abriéndose camino en la ciudad en oficios como feriantes, vendedores de leña, obreros o carpinteros. Pero la población de la toma de Pampa Irigoin rápidamente comenzó a crecer y ya a principios de 1969 arribaban a la toma más de 400 pobladores.
Fue en ese contexto que el gobierno de Frei Montalva, a través de su ministro del Interior Edmundo Pérez Zujovic, ordenó el desalojo de los pobladores y la mañana del 9 de marzo de 1969, un contingente de 200 policías armados entraron a la toma a pie y a caballo, destruyendo y prendiendo fuego a las casas, disparando a mansalva a los pobladores.
Pero en la toma habían preparado mecanismos de autodefensa que permitieron resistir el desalojo. Con la valentía que caracteriza a los que luchan por la casa, se enfrentaron a la policía con palos y piedras, siendo en esta batalla donde fueron asesinados 10 pobladores, incluyendo un bebé intoxicado por los gases, dejando a 50 otros más heridos.
Aunque la matanza quedó impune por la justicia del viejo Estado, Edmundo Pérez Zujovic fue ajusticiado en junio de 1971 por la organización Vanguardia Organizada del Pueblo, mientras conducía su auto Mercedes Benz por las calles de la comuna de Providencia.
La batalla de los pobladores de Pampa Irigoin quedó inmortalizada en la canción “Preguntas por Puerto Montt” del cantor popular Víctor Jara y hoy día, a 48 años de ocurrida, cuando sigue más viva que nunca la demanda de la lucha por la vivienda, la recordamos con orgullo por el arrojo que ha caracterizado siempre a quienes luchamos por una casa.